El rapero estadounidense de origen mexicano Tekashi 6ix9ine cuyo nombre real es Daniel Hernández y la cantante dominicana Yailin ‘la más viral’ han sido protagonistas en las últimas semanas de una novela en la que los escándalos, la violencia e incluso la cárcel han sido los temas principales.
Ahora bien, en las últimas horas se conoció un nuevo capitulo en esta historia que aún se sigue escribiendo entre el par de cantantes. De hecho, las redes sociales se encendieron al ver a Yailin nuevamente con Tekashi, pero eso no fue todo, pues el rapero decidió sorprenderla con tremendo regalazo.
No obstante, cabe destacar que, 6ix9ine pasó recientemente 9 noches en medida preventiva tras ser acusado de violencia de género e intrafamiliar contra su pareja y su madre, Wanda Díaz Núñez. Aunque recibió libertad condicional debido a que una jueza no encontró pruebas suficientes para declararlo culpable, la Fiscalía dominicana anunció que apelará la libertad condicional dictada como medida preventiva al rapero.
En un comunicado divulgado, el Ministerio Público (Fiscalía) explicó que su decisión de recurrir se debe a que, en su opinión, se realizó una aplicación errónea de la norma y al peligro que correría la víctima al no imponerse a Tekashi la medida privativa de libertad solicitada.
Además, hay que resaltar que también se emitió una orden de protección a favor de las víctimas que prohíbe a Tekashi acercarse, molestar, intimidar, asediar, hostigar o amenazarlas por cualquier vía. Por lo que la sorpresa fue doble para los internautas al ver las imágenes captadas en las últimas horas.
Están tan dichosos que adelantaron la celebración de San Valentín, una festividad que en esta parte del mundo se celebra con gran entusiasmo. Aunque él aclaró que su gesto no se compara con lo que ella recibirá este día, dejó patente que lo hizo con un amor profundo.
Tekashi sorprendió a Yailin regalándole un lujoso automóvil convertible de color blanco, adornado con un lazo verde. Lo llevó hasta su residencia y la instó a probarlo de inmediato. Los testigos presentes no podían dar crédito a lo que estaban presenciando. El cantante repetía constantemente cuánto la amaba.